Los ciberdelincuentes están más activos que nunca. Las nuevas tecnologías, el acceso a Internet y el avance hacia un mundo cada vez más conectado, propician el uso de medios informáticos para cometer delitos. Solo en España, el Observatorio Español de Delitos Informáticos (OEDI) registró 81.307 ataques informáticos.
Recientemente hemos vivido ataques globales como el archiconocido WannaCry que afectó a más de 30.000 usuarios en 170 países y causó, tan solo en los primeros 4 días, unas pérdidas valoradas en miles de millones de dólares. WannaCry fue el mayor ataque jamás visto dentro de su tipología. El CSIS (Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales) estima que, mundialmente, el cibercrimen tiene un coste de 600 mil millones de dólares, o lo que es lo mismo, el 1% del PIB mundial.
¿Sabrías cómo actuar si recibieras uno de estos ataques? ¿Tiene tu empresa un procedimiento establecido para estos casos? Es importante saber qué debemos y qué no debemos hacer en caso de que nuestro equipo sea infectado.
Más del 67% de las pymes fueron atacadas en 2018 y el 54% reconoció haber tenido brechas de seguridad.
Hoy en día, es extraño que una empresa, independientemente de su tamaño, no maneje algún tipo de información que pueda ser de interés para los ciberdelincuentes. Por eso, Fernando Quintanar, Director de Ciberseguridad de Grupo ICA, asegura que "cualquier empresa, independientemente de su tamaño, puede ser objeto de un ataque informático. Actualmente las empresas de menor tamaño dan poca importancia a la seguridad informática porque consideran que son de bajo interés para los ciberdelincuentes, pero se equivocan". Según el Instituto Ponemon, mientras que solo un 60% de las pymes tiene un plan de respuesta ante incidentes de ciberseguridad, más del 67% fueron atacadas en 2018 y el 54% reconoció haber tenido brechas de seguridad.
"Estas empresas son mucho más vulnerables y cuentan con medidas de seguridad mínimas. Son un blanco fácil”, afirma Quintanar. Por eso, tenga el tamaño que tenga tu empresa, “siempre debes asumir que los ciberataques son inevitables y que, por tanto, serás víctima de ellos en algún momento. En el momento en el que te convenzas de esto, dejarás de ver la ciberseguridad como un gasto para convertirlo en inversión”. El Instituto Ponemon situó el coste medio de un ataque exitoso en 2018 en los 6,3 millones de euros o lo que es lo mismo, unos 413 euros por trabajador en el caso de una gran empresa y casi el doble, 671 euros, en las pymes.
Todas las recomendaciones anteriores tienen carácter general y siempre se recomienda poner tu ciberseguridad en manos expertas que puedan solucionar los incidentes o atenuar, al máximo, el impacto de cualquier ataque informático sobre tu organización.